sábado, 16 de marzo de 2013

Champions League. Los caprichos del sorteo

El sorteo de la Champions League nos ha dejado un partidazo que dejará fuera a uno de los favoritos: el Bayern – Juventus será el partido estrella de la máxima competición a nivel de clubs. El equipo de Turín jugará la vuelta en casa y tiene mucha hambre después de su reconversión. Los de Pirlo van con tanta ilusión como calidad, la Vecchia Signora está practicando un fútbol de altos quilates y gobierna el Calcio. Tras derrotar al Chelsea en la fase de grupos, los italianos han demostrado un cambio psicológico y de ADN. Siendo muy fuertes en defensa, no ponen en práctica el clásico juego italiano: tocan y proponen mucho fútbol.

Al igual que su rival (y que el Dortmund, el Barça y el Madrid) no se juegan nada en liga ni en copa, donde está casi todo el pescado vendido, lo cual hará que se centren en esta competición y nos dejen encuentros estelares.

El sempiterno Buffon defiende la portería con la misma solvencia de siempre. Por delante, una línea de tres centrales en la que destaca la gran temporada de Andrea Barzagli y de Bonucci. A los lados, dos laterales con la suficiente libertad para incorporarse al ataque. Lichtsteiner en la derecha y Federico Peluso en la izquierda completan una defensa que funciona casi a la perfección. Sin bien es cierto que les ha tocado el equipo que todos querían evitar: el chileno Vidal y el francés Pogba son las dos grandes bazas de los de Conte. El primero, por una inesperada resolución ofensiva que complementa su ya conocida solvencia en tareas más oscuras. El ex red devil, por su parte, ha explotado en la Juve y es la gran revelación de la Serie A. Ahora que el gran Marchisio se ha recuperado habrá una dura pugna por un sitio muy bien cubierto.

Y enfrente el temible Bayern, el futuro equipo de Pep ha evitado por el momento el duelo del morbo y a los merengues. El gran favorito para ganar la Champions será quien más difícil lo tenga. La llegada de nuevos jugadores no ha hecho más que perfeccionar la máquina de guerra alemana. El Bayern, a pesar del susto final que le dio el Arsenal en octavos, es el equipo más potente hoy en día. Está arrasando en la Bundesliga (20 puntos de ventaja) y buscan venganza después de la cruel derrota en casa del pasado año. Con esta experiencia y tras más de una década sin ganar la orejona, Schweinsteiger ha encontrado en Javi Martínez esta temporada un guardaespaldas de lujo. Ambos llevan la voz cantante del Bayern de Múnich.

Mandzukic, Ribery, o Müller también están rayando a un nivel espectacular que hace que todos sus rivales sucumban ante su calidad. Por su parte Dante, Lahm, Alaba y Boateng han hecho de la portería que defiende Neuer una fortaleza inexpugnable.


Málaga – B.Dortmund

El tercero en cuestión es el Borussia de Dortmund, el equipo alemán reúne juventud y talento y es, después de los dos anteriores, favorito para levantar el trofeo a mi modo de ver. Es el conjunto que más aficionados mueve en Europa, nadie consigue arrastrar tantos seguidores como ellos sea donde sea el desplazamiento. Sus jugadores no son top mediáticos, pero sí de máximo nivel. Su único punto débil es la inexperiencia, pero a veces se traduce en un descaro ganador. Haber caído en la Copa Alemana y tener imposible la Bundesliga les hace aun más peligrosos. El Málaga muy probablemente sea un juguete en sus manos.

Han batido al Real Madrid y al City y están invictos en Europa. Despliegan un juego ofensivo y muy atractivo. El emparejamiento en octavos contra un gran Shakhtar Donetsk, infravalorado en los medios, puede despistar a más de uno. Weidenfeller es un portero muy regular y un seguro de vida. Hummels tiene una gran salida de balón y a balón parado es muy peligroso, como Subotic, una amenaza aérea constante. Piszczek y Schmelzer son dos puñales, dos laterales con vocación ofensiva a los que el Málaga les tiene que buscar la espalda si quiere conseguir algo.

Ilkay Gündogan marca los tiempos de este Dortmund, crea, distribuye y tiene llegada. Sus guardianes son Sven Bender o Sebastian Kehl, jugadores muy trabajadores y bregadores que suplen la falta de velocidad de los centrales.

En ataque tres hombres de enorme rapidez y movilidad. El polaco Blaszczykowski arranca desde la derecha mientras que Marco Reus lo hace desde la izquierda. Reus, con un gran sprint y cambio de ritmo, y Mario Götze, dando el último pase y aportando su creatividad desde la mediapunta, son los hombres más desequilibrantes del Dortmund. Por delante Lewandowski, un ariete elegante, amante del fútbol combinativo, con remate y grandes recursos en el juego de espaldas a portería. Reus desde la la segunda línea le crea espacios y le ofrece pases en profundidad. Están muy compenetrados y sus transiciones son rapidísimas.

Lejana queda la final de 1997, una de las primeras que vi, en la que el Dortmund se impuso a la Juve con un 3-1. El gol de Del Piero fue inútil y los de Lippi no pudieron aumentar su palmarés. Aquel año el Atlético de Madrid había jugado contra los alemanes y les había ganado en la fase de grupos las dos veces, pero el Ajax -entonces un rival temible- les apeó de la competición.


PSG - Barça

El PSG, después del Galatasaray, era el rival más asequible. Si el Valencia no hubiera hecho la siesta en Mestalla otro gallo hubiera cantado. Los franceses son un equipo sin identidad futbolística, tienen un medio campo y una delantera plagada de estrellas pero una defensa débil y poca unión de vestuario. A esto hay que sumarle que en la ida, en casa, no contarán con Ibra. Lavezzi, Lucas Moura y Pastore pueden solucionarte una eliminatoria... pero no de cuartos de final contra el Barça, Madrid o Bayern. No obstante el PSG ha demostrado la importancia de un buen entrenador, Ancelotti ha llevado a este gran proyecto de equipo mucho más lejos que Mancini al City en los dos últimos años con mejores jugadores todavía. En unos años el conjunto parisino puede estar disputando finales de Champions, a Mou le ha costado tres años pero ahora el Madrid carbura que da gusto.

R.Madrid - Galatasaray

Otro clásico hubiera sido indigesto, nadie quería a la histórica Juve ni al todopoderoso Bayern, pero sobretodo jugar otro Barça-Madrid les hubiera ahogado y dejado mermados de cara a la siguiente ronda. Ambos necesitaban tomar aire y dejarse de ver por un tiempo, quizás más los culés tras la mala racha acontecida. El club blanco ha sido emparejado con la perita en dulce del sorteo, el conjunto turco es el más débil de los ocho sin ninguna duda.

Lo peor para el Galatasaray es que sus puntos débiles coinciden con los puntos fuertes de los merengues. El equipo de Drogba hará una fiesta del partido de vuelta y más le vale a Mou ir con los deberes hechos allí. Y con eso puede jugar Fatih Terim, a Mourinho en las eliminatorias a doble partido le gusta jugar con el marcador en la ida (no encajar, ser cauteloso e ir a rematar allí donde los goles valen doble) y es ahí donde deben rascar los turcos si quieren tener posibilidades: el equipo de Cristiano Ronaldo no irá a machacar en el Bernabéu. Es presumible que el Madrid controle la posesión y habrá que ver como se desenvuelven; en Manchester, donde la injusta expulsión de Nani se tornó decisiva, no les fue muy bien.

En el recuerdo de algunos madridistas estará la Supercopa de Europa del 2000, donde el Galatasaray derrotó al equipo de Raúl con dos goles de Jardel. Pero ¿qué equipo tiene hoy el desinflado conjunto turco?

Terim ha fichado a conciencia en el mercado de invierno y si da la campanada sorprenderá a toda Europa. Eboué y Riera le dan en defensa fiabilidad, experiencia y profundidad. Felipe Melo activa el juego del Galatasaray y Sneijder es el que da los resultados. Altintop se ha reencontrado con su fútbol y rinde a buen nivel y Ylmaz, que ante el Schalke 04 igualó a Cristiano Ronaldo con ocho goles en esta edición de la Champions, es un gran socio para el delantero de Costa de Marfíl.

Mi corazón quiere ver a la Juventus levantado el trofeo, pero los dos equipos alemanes, a mi juicio, son los favoritos para hacerlo.

En la Europa League el sorteo deparó lo siguiente:


Chelsea – Kazan

Benítez no acaba de encontrar la tecla del equipo, que gana dada la calidad que atesora y no por el fútbol desplegado. Sigue necesitando un mediocentro organizador que deje más libres a Hazard y Mata. Contra el Steaua de Bucarest el eterno Terry tuvo que acudir al rescate del equipo, al igual que Cech. El vigente campeón de la Champions, que desde la edición pasada de la máxima competición continental de clubs ha tenido tres entrenadores, va ahora a por la Europa League.

Su rival es el Kazan de Orbaiz, Rondón, Natkho... que ha eliminado al Levante en un año histórico para los granotas que parecían ir camino de repetir la final del Alavés que todos tenemos en las retinas. Si solventan bien el partido en el patatal ruso: está hecho.

Tottenham – Basilea

Mi favorito para el torneo es el conjunto inglés, que viene de eliminar al Inter de Milán. Una semifinal (o final) contra el Chelsea, sería la oportunidad de Villas Boas de vengarse de su ex equipo. El Basilea está haciendo una gran competición y los de Gareth Bale harían bien no subestimándoles, los suizos han derrotado al Zenit a pesar de jugar en tierras hostiles con uno menos.


Fenerbache – Lazio

Después del Tottenham probablemente sea la Lazio el conjunto más en forma de la Europa League, no deberían tener problemas en pasar a la semifinal los italianos. Su delantero Kozak viene de hacerle un hat trick al siempre complicado Sttutgart.

Benfica – Newscastle

Quizá la eliminatoria más igualada. Los portugueses tienen a Cardozo on fire y las urracas han echado de la competición al Anzhi de Eto'o. La Premier puede colocar en semifinales a tres equipos ingleses, lo cual aliviaría la decepción de no tener ninguno en cuartos de final de la Champions.

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