Hoy
arrancaba, con la ceremonia de inauguración en el Palau Sant Jordi,
el Mundial de Natación Barcelona 2013. Las competiciones del
decimoquinto Campeonato Mundial de la Federación Internacional de
Natación (FINA) comenzarán este sábado 20 de julio y concluirán
el 4 de agosto.
La
ciudad de Barcelona, que repite como sede después del Mundial de
2003, contará con cuatro espacios de competición: el Palau Sant
Jordi, la piscina municipal de Montjuic, las piscinas Bernat
Picornell y el ‘Moll de la Fusta’. RTVE
producirá simultáneamente la señal internacional de las cuatro
sedes.
Las
finales de natación sincronizada, en aguas abiertas y los clavados
tendrán lugar durante la primera semana, mientras que la natación y
el ‘High Diving’ (clavados desde gran altura), nueva competición
en esta edición de 2013, serán durante la segunda semana. Las dos
competiciones de waterpolo se jugarán desde el domingo 21 de julio
hasta el viernes 2 de agosto.
La
participación será de 2.293
ateltas de 181 países,
cifra récord en cuanto a nacionalidades en la historia de los
Mundiales. Durante
los días del certamen se disputarán 40 finales de natación, 10 de
saltos, 7 de natación sincronizada, 6 de aguas abiertas, 2 de
waterpolo y 2 de saltos de gran altura.
Será
el Mundial de Ryan
Lochte y de Missy Franklin;
el de César Cielo, Sun
Yang o Ye Shiwen,
Florent Manaudou o Camille Muffat, de Ranomi Kromowidjojo, de Camille
Lacourt, de Oussama Mellouli, de Ruta Meilutyte, y de Mireia
Belmonte: nuestra gran esperanza.
Debería
ser la enésima confirmación del poder del waterpolo balcánico
frente al italiano y deberíamos ver una progresiva recuperación de
nuestro waterpolo masculino,
que
últimamente se ha visto superado en protagonismo por el emergente
equipo femenino de Miki Oca; que ahora vuelve a apuntar alto, pero ya
no serán la gran sorpresa.
En
natación sincronizada, el equipo ruso volverá a ser el máximo
favorito. Trabajan con secretismo, no compiten en el panorama
internacional más allá de las grandes competiciones. Difícilmente
perderán el oro en el solo, el dúo y en los equipos. El único
margen de sorpresa está en el 'combo'. El morbo estará en el equipo
español sin Anna Tarrés dirigiendo. Tampoco estará Andrea Fuentes,
el relevo generacional es Ona Carbonell -la capitana- y Esther Jaumà
como máxima responsable técnica.
También
será el Mundial de los saltadores chinos, del joven talento
británico Tom Daley, de los clavadistas mexicanos o de los notables
representantes de la escuela rusa cuyas siluetas dibujarán las
postales de este Mundial con la Sagrada Familia de fondo.
